TEXTO Y FOTOS JESUS DUS

Hace, ahora, casi quince años, que tuvimos la ocasión y el privilegio, con motivo de escribir para el programa de los " Tres Dies de Picassent", de dejar pasar unas horas, frente a un café con D. Antonio Iglesias, el más veterano de los pilotos, que nos fue desgranando su vida, sus puntos de vista, sus inacabables anécdotas, todo hubiera dado para un largo libro, no solamente sobre nuestro querido trial, sino que , al mismo tiempo, una lección sobre la vida, sobre como vivirla, una lección de filosofía personal y universal sobre la felicidad ... ...nos cuenta que descubrió el trial demasiado tarde, con treinta y seis años se sacó su primera licencia de junior, una edad en la que solo se aspira a ser veterano, "debute en un trial, en Picassent, en 1971 y quince días después ya me presente en Manresa en un Campeonato de España con los Pedro Pi, Ignacio Bultó, Taulé, etc... fueron 50 km. de trial y nevando." Meses más tarde conoció, en un cursillo en Madrid Rob Edwards y allí Pedro Pi lo invitó a pilotar para Montesa. " Desde entonces, mi marca de toda la vida". En aquellos años el trial era distinto, era habitual desplazarse allá donde hubiese una carrera. " Hacíamos kilómetros, no nos perdíamos el Campeonato de España y había gente de todas partes, de Valencia los más habituales eramos Vilanova, Cabrelles, Miguel Sanz, etc..." Toni cree que al contrario de otras especialidades, el trial no ha mejorado, las zonas han perdido su primitiva idea del trial inventado en Inglaterra con zonas técnicas y sin peligro, al alcance de muchos pilotos, se ha pasado a giros cerrados y desniveles imposibles. " Hoy da pena ver la baja participación de los pilotos locales cuando recala el Campeonato de España en su provincia, antes pasábamos meses entrenando y preparando la moto para la gran cita, donde poder medirnos con lo mejor de este país". También nos recuerda una época más deportiva, más humana, donde, además de competir, se disfrutaba de la compañía, de la amistad, " es triste ver a los jóvenes y a sus consejeros tratando, con un afán egoísta y ambicioso de ganar todas las carreras, olvidando otros valores, suben de forma rápida y de la misma forma desaparecen al primer revés". Se le ilumina la cara cuando empieza a contar aquellos viajes a los triales, " Íbamos mucho con Ribas, con Quique " el Cirilo", con él en unos dos días en Morella cogimos una guitarra y cantamos por las calles toda la noche, también me acuerdo cuando en Calamocha, detuvo el coche y empezó a lanzar cohetes por todo el pueblo provocando el estupor de los lugareños, otro recuerdo imborrable fue en Molina de Aragón, donde al final del trial se hacía un concurso de tiro de cuerda por comunidades, allí estaban los vascos con Landaluce, los maños con Cañanda, nosotros, etc ... y los perdedores eran arrojados al rio, donde además se entregaban los trofeos, había que meterse hasta la cintura para recoger la copa". Se lamenta de que aquellos tiempos no volverán, hoy la gente sale corriendo y ni recoge premios, por ello le agradan tanto los triales de larga duración, como este de Picassent donde, dice, se vuelve a la charla distendida, a las risas, a las anecdotas, y recuerda aquellas interzonas de noventa km. y los triales por equipos," Con Quique ganamos en Ibiza, nadie sabia quien era ese Navarro que lideraba la clasificación y se quedaron de piedra al verlo pasar las zonas con el puro en la boca y cantando". Su punto culminante se lo consiguieron los amigos del "Sense Peus" de Paiporta, se lo llevaron a los Scottish, estuvo en míticas zonas como Pipeline, de alli guarda una curiosa y graciosa foto arrodillando rezando en aquella historica sección. Casi todos nosotros recordamos que cuando debutamos en esto del trial, Antonio Iglesias ya estaba y que cuando dejamos el trial, Antonio iglesias seguia tomando la salida, "Yo siempre sali a correr consciente de mi nivel, pero con la motivación, el entusiasmo y la concentración que muchas veces me dió la victoria". En 1986 recibió, con todo merecimiento, la medalla al merito deportivo otorgada por la R.F.M.E. Toni Iglesias, como todos sabéis, nos ha dejado, tras sufrir una larga y cruel enfermedad, pero no se lo ha llevado todo, con nosotros queda el eco de aquellos consejos que sobre conducción nos daba en su rodeno de Naquera , sobre sus largas conversaciones, su entusiasmo y su pasión desmedida por el trial, esa que nunca, nunca tendremos nosotros...